Ya se la llevaron, pues como todo, siempre hay un principio y un final, este es el caso de nuestra Patrona la Santísima Virgen de las Maravillas, que después de su llegada a la Parroquia Mayor de Santa María Magdalena en el día diez y, haciendo compañía a todos los cehegineros y visitantes que hasta aquí han venido para contemplarla muy de cerca, ya que es la única oportunidad que tienen durante todo un año, dado a la lejanía y altitud de su camarín, como digo, nos ha acompañado y permitido rezarle y pedirle cara a cara contemplando su belleza sin par, pues como digo, el resto del año, nos tenemos que conformar con imaginarnos su cara y la del niño, que por cierto, ya se recuperó la Corona Ducal del Niño que andaba desaparecida, siendo hallada por alguien que la conocía perfectamente, en manos de las Monjas Clarisas de Cieza, recuperándose de nuevo después de algunas gestiones pertinentes, aunque oficialmente no se le haya comunicado al Pueblo de Cehegín, pues su valor en realidad, más que económico, es un valor histórico-cultural-patrimonial y, llegado el día catorce y último de nuestras fiestas, emprende de nuevo Romería y Procesión de regreso a su Santuario en el Convento de San Esteban, (protomártir de la iglesia), quedándo un nuevo vacío de todo un año, hasta las próximas fiestas que acaban de empezar su cuenta atrás.
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